1º de Timoteo 5:1-8
Mensaje claro y profundo para aquellos que profesamos la fé Cristiana. Me alegro y regocijo de la claridad y contundencia del mensaje, que no tiene ninguna connotación superficial ni subjetiva, sino que como siempre la Palabra de Dio ses directa y práctica.
El Amor y el cuidado de los nuestros es una responsabilidad que se debe ejercitar cada día. Todos tenemos un rol principla y varios secundarios. Dependiendo de las circunstancias, me pondré como ejemplo para mostrar la idea: soy Esposo y Padre como rol principal y luego de ello vienen varios mas. Hijo, hermano, yerno, cuñado, tio, empleado, miembro de una Iglesia, residente de un país extranjero, etc. etc.
Sumémos a lo anterior el concepto de proveedor que tenemos de si mismo. Muchas veces el tiempo lo ocupamos en traer cosas materiales a la casa y cada vez ocupamos mas nuestro tiempo para las crecientes necesidades y/o cuentas por pagar en la casa. Nos olvidamos de proveer el lideragzo y el cuidado espiritual que los nuestros necesitan. El trabajo debe ser integral y debemos pedir el auxilio de nuestro Dios para que podamos ser coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos.
Pero no descuidemos los roles secundarios, o no pongamos los roles secundarios como los primarios. A mi me choca mucho el aspecto de los hijos con los Padres ancianos, es verdad que siendo adultos y habiendo formado hogares la responsabilidad primaria es con los esposas/esposas y con los hijos, pero también es cierto que quienes nos criaron y por quienes estamos donde estamos merecen y necesitan tener un espcio importante en nuestras vidas. Es un poco lo que aprendimos el otro día, a ser agradecido y solidario. Felizmente en mi caso mi viejo tiene medios economicos suficientes para vivir tranquilo, pero sus años los lleva encima, sus limitaciones de salud lo tienen contenido a lo que su impulso y deseos lo llevan. En mi viaje a Perú el viejito estaba feliz de poder hacerle las atenciones a sus nietos, de mostrarnos su cariño en cada momento, por eso me he impuesto la obligación por Amor de estar pendiente de él siempre, a pesar de que no es un gran conversador por teléfono, se que el viejo espera mi llamada cada semana.
Termina el versículo 8 diciendo:" porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fé, y es peor que un incrédulo" - Por sus frutos los conocereís dice otra vez el adagio Bíblico. Mis hechos hablan mas fuerte que mis muchas palabras.
Que Dios los Bendiga!
:)LG
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